Toros y toreros: ¡Todo un arte!
Picasso Barceló litografía Carteles Augusto Banegas José Manuel Capuletti José Luis Galicia Vicenç Badalona Ballestar Susana Villar Jean Louis Guitard Emília XargaySobre el arte del toreo se ha escrito ríos de tinta, y hay tantos apasionados en del mundo de los toros como detractores. De la misma forma, a lo largo de la historia ha habido numerosos artistas que han mostrado su fascinación por toros y toreros, y se han dejado llevar por el hechizo de las corridas y el ambiente de los cosos taurinos.
Uno de los artistas que dejó constancia de su interés por el mundo del toreo fue Pablo Picasso. Desde bien pequeño había asistido con su padre a la plaza de toros de Málaga y cuando una vez le preguntó André Malraux, le diría: «La vida de los españoles consiste en ir a misa por la mañana, a los toros por la tarde y al burdel por la noche. ¿Cuál es el elemento común? La tristeza».
Para Pablo Picasso la llamada "Fiesta Nacional" era un excelente tema, además de las grandes posibilidades plásticas, Pablo Picasso veía en el toro un símbolo cargado de violencia, dramatismo, erotismo o amor. La dualidad de ese significado contrapuesto estriba básicamente en que el toro puede ser visto como un peligroso animal o como una pobre víctima.
Pablo Picasso. Bocetos para el Guernica nº 1 y 2.
Tras años de que Picasso representara toda clase de escenas taurinas, como la lidia, la figura del picador o las plazas de toros, llegó en un momento delicado de su vida, el encargo de la gran obra del Guernica. La violencia vivida durante el nazismo y su crisis matrimonial llevaron a Picasso a convertir su inestabilidad emocional y su ira en pinceladas taurinas.
Numerosos artistas se dieron cuenta de que el mundo de los toros podía tener cabida en sus obras. Así fue como Francis Picabia, Georges Braque, Juan Gris o André Masson se interesaron por la iconografía taurina.
Uno de los amigos de Picasso: José Luis Galicia, compartía esa afición por los toros, ambos artistas se conocieron en 1952. José Luis Galicia fue el responsable de realizar diversas series de "Tauromaquias". Galicia diría con profundo sentimiento: «Siempre que se enfrenta un hombre a un toro, sabe que puede perder la vida, que va a jugársela, y el verdadero drama humano quizá el único, es saber que vamos a morir».
Vicenç Badalona Ballestar. Rejoneo. Óleo sobre tablex firmado en el ángulo inferior izquierdo.
Dos de los cartelistas más importantes del mundo del toreo son José María Tuser y Vicenç Badalona Ballestar. Antes de que llegaran los carteles taurinos, los pregoneros eran los encargados de anunciar las corridas de toros. Ballestar fue el encargado, desde la década de los 50, de realizar los carteles para la Monumental de Barcelona y el resto de plazas de toros de Cataluña, las Islas Baleares e incluso Nîmes.
Otro de los artistas que le han dedicado un espacio al mundo de los toros es Miquel Barceló, con cerca de un centenar de obras dedicados a temática taurina. Al igual que Picasso su afición le viene de cuando era niño y asistía en la Plaza de Felanitx (Mallorca) a los festejos taurinos que se organizaban en las fiestas patronales.
No hay que olvidar tampoco que muchos artistas ven en el mito del Minotauro, nacido en Creta gracias al amor de una mujer y un toro, lo legendario, el animal primitivo que nuestros ancestros adoraban. Es el caso de Emília Xargay que se aficionó a los toros cuando trabajaba en la película "Pandora y el holandés errante". Durante el rodaje conoció al torero Mario Cabré y supo transmitirle su pasión por estos bellos animales que sirvieron de modelo a numerosas esculturas de Xargay.