El arte pop de Roy Lichtenstein
LichtensteinRoy Lichtenstein nació en Manhattan el 27 de octubre de 1923 en el seno de una familia judía acomodada originaria de Alemania. La infancia privilegiada de Roy Lichtenstein lo encaminaron rápidamente a desarrollar su pasión por el arte, el diseño y la música.
Roy Lichtenstein así como Andy Warhol, no estaban en la misma onda que el arte que se hacía en su época, lo demuestra que más de medio siglo después, sus obras sean de rabiosa actualidad.
Roy Lichtenstein. "Goldfish Bowl II". Postal firmada a mano por el artista. Se adjunta certificado
Roy Lichtenstein anhelaba romper completamente con los enfoques académicos del mundo del arte. De hecho, a lo largo de su vida utilizó toda clase de materiales y objetos cotidianos para crear sus obras.
Su mayor fuente de inspiración fueron los anuncios publicitarios y los cómics de la década de los 50. Con esa mezcla poco usual, Roy Lichtenstein, fundaría un estilo personal que destacaría de forma sobresaliente en el paisaje del arte moderno de Estados Unidos y del mundo entero.
La sociedad de consumo en los Estados Unidos despertó en la década de los 60. El estilo de vida americano y sobretodo el que llevaban las clases trabajadoras, convertían a Norteamérica en una sociedad acomodada.
Las mejoras sociales se movían en varios conceptos que están muy presentes aún en nuestra sociedad: tener una casa en propiedad, las últimas novedades que se anuncian en televisión y lograr, así como mantener, el ideal de belleza físico. Llegaba la era de consumir por consumir.
Roy Lichtenstein encontró su lugar entre los artistas del pop art y también en el mundo de la enseñanza, actividad que compaginaba en New Jersey con sus pinturas y exposiciones. En la galería de Leo Castelli de Upper East Side de Manhattan Lichtenstein compartía espacio con el sueco Claes Oldenburg o los artistas nortemaericanos: Jim Dine o James Rosenquist.
Lichtenstein jugó con el mito del sueño americano y el estilo de vida estadounidense, creando obras con alta carga de ironía que criticaban la banalidad de los objetos cotidianos y ridiculizaba los defectos del comportamiento humano sin tapujos. Para ello, Roy Lichtenstein utilizó personajes tan conocidos como: Popeye, Dick Tracy o los dibujos de Walt Disney.
En 1963, Roy Lichtenstein se sumerge por completo en el universo del cómic. Con obras tan importantes y conocidas como: "Whaam!" o "Drowning Girl", sin saberlo estaba creando su propio estilo: combinación de líneas gruesas, colores llamativos, ausencia deliberada de profundidad y fondos de puntos al estilo "Ben-Day" que se inspiraban en las técnicas de impresión.
Hacia el final de su vida, Roy Lichtenstein se interesó por la escultura, como la realizada en Barcelona para los Juegos Olímpicos de 1992 "Barcelona Head". Veinte años después de su muerte, Roy Lichtenstein sigue siendo uno de los representantes imprescindibles del pop art. Como lo demuestra, las últimas retrospectivas de organizadas por el Art Institute de Chicago y la Tate Modern de Londres.
En la actualidad, las aproximadamente 4.500 obras realizadas por Roy Lichtenstein se exhiben en el Museo de Arte Moderno de San Francisco, el Museo Solomon R. Guggenheim de Nueva York o el Museo Ludwig de Colonia (Alemania) que alberga la mayor colección de pop art de Europa.
